Colecciones
José Agustín Arrieta, 1803-1874. La ciudad de Puebla en el siglo XIX
José Agustín Arrieta es, sin duda, uno de los pintores mexicanos más fascinantes del siglo XIX. Originario de Santa Ana Chiautempan en Tlaxcala, su familia se trasladó hacia 1807 a la ciudad de Puebla donde se formó como pintor y desarrolló una vasta producción que abarcó todos los géneros artísticos: la pintura religiosa, la alegoría, el retrato, las escenas costumbristas, el paisaje y la naturaleza muerta.
Así como la ciudad de Puebla fue el escenario de la obra de Arrieta; las prácticas sociales, religiosas y culturales de los habitantes fueron sus principales protagonistas. Las escenas costumbristas y “naturalezas muertas” resultaron ser la delicia de los coleccionistas poblanos y de los escritores más afamados de la época como Guillermo Prieto y Manuel Payno, quienes celebraron sus guiños “populares” y, a veces “picarescos”, y su interés por representar al pueblo en franca oposición a las temáticas cultivadas en la capitalina Academia de San Carlos.
La peculiaridad en su obra señalada por Prieto y Payno en el siglo XIX fue decisiva para su revaloración en la primera mitad del siglo XX, cuando la literatura artística posrevolucionaria lo catalogó como uno de los mejores exponentes de la “pintura popular” ignorando su formación en la Academia poblana y los modelos cultos de la pintura novohispana y europea que nutren su obra, y aislándolo del sistema artístico en el que la produjo.
Luego del homenaje nacional que se le rindiera en 1994 con una magna exposición en el Museo Nacional de Arte en Ciudad de México, en donde se reunió la mayor cantidad de obra del artista hasta la fecha y además se realizó un importante rescate documental, la presente exposición pone a disposición del público una selección de sus pinturas provenientes de colecciones privadas y públicas para su disfrute, y a partir de ellas revisitar el universo plástico y simbólico de Arrieta en el contexto poblano del siglo XIX. Igualmente, la muestra invita a reflexionar sobre los vínculos con la pintura religiosa de tradición novohispana y con la llamada “pintura de castas”; propone una lectura de las escenas costumbristas que pretende trascender el sesgo nacionalista para desvelar conflictos de clase, raza y género; y plantea la urgente vinculación de las alacenas con la rica gastronomía angelopolitana y la cultura material producida por las manufacturas regionales.
“Producción Nacional realizada con el Estímulo Fiscal del Artículo 190 de la LISR (EFIARTES)”
José Agustín Arrieta | Artista
Angélica Velázquez Guadarrama | Curadora
María José Rojas Rendón | Curadora