La actualización arquitectónica del Museo Amparo consistió en renovar áreas y construir nuevos espacios conservando la distribución original del edificio. Planeado en tres etapas, el proyecto estuvo a cargo del despacho TEN Arquitectos con la dirección de Enrique Norten.
Primera etapa
En febrero de 2013, se inauguró la primera etapa de actualización. Se generaron nuevos espacios en interiores sumando otras estrategias: ofrecer mejores servicios y optimizar los espacios dedicados a exposiciones temporales.
Se consiguió neutralidad mediante los materiales y acabados, además de que se les dio un nuevo valor a los edificios históricos mediante una mayor fluidez espacial.
Resultados:
- Renovación de salas de exposiciones temporales
- Actualización de la Biblioteca
- Modernización del Auditorio
- Salas didácticas
- Instalaciones óptimas para resguardo de obra
- Mayor capacidad en espacios para actividades educativas
- Tienda
- Terraza con panorámica
- Cafetería
- Acceso a las Salas de Arte Virreinal y Siglo XIX a través del Vestíbulo, elemento central de conexión y distribución con las diferentes áreas
- Adecuación de las azoteas para establecer una nueva relación con el paisaje urbano y el skyline del Centro Histórico de Puebla, replanteando la relación del edificio con su contexto
- Mayor aprovechamiento de la luz natural
- Accesos óptimos para personas con capacidades diferentes
Segunda etapa:
Esta fase del proyecto, abierta al público en diciembre de 2013, consistió en la reapertura de 1848 metros cuadrados de espacios para exposiciones temporales, equipados según los parámetros internacionales de exhibición que permiten recibir proyectos de los más diversos tipos y procedencias. Se integraron también áreas de servicios a sus visitantes con óptima funcionalidad.
Tercera etapa:
La tercera etapa, inaugurada en abril de 2015, actualizó las salas y el discurso museográfico de la Colección Permanente de Arte Prehispánico, ubicada en una superficie de 1285 metros cuadrados. Al concluir el proyecto, el Museo amplió sus espacios públicos, de exhibición y de almacenaje en cerca de 3000 metros cuadrados y cuenta con una superficie total de casi 9000 metros cuadrados.
Con esta actualización arquitectónica, el Museo Amparo reafirma su posición como centro cultural de referencia en nuestro país, tanto por la importancia de su colección permanente y exposiciones temporales, como por sus edificios e instalaciones y por el programa de actividades culturales y educativas que ofrece a la comunidad.