Yoshua Okón. Colateral
Chille  | Yoshua Okón. Colateral | Museo Amparo, Puebla
Chille  | Yoshua Okón. Colateral | Museo Amparo, Puebla
Año 2009
Año 2009
Técnica

Videoinstalación en dos canales. 

Duración 25 minutos  01 segundos 
Información adicional

62 esculturas de yeso en bruto.

Producto en colaboración con Galería Gabriela Mistral.

Colección VHP, Ciudad de México.

La primera parte de Chille es una reconstrucción a gran escala de una idealizada maqueta del funeral de Augusto Pinochet (1915-2006) hecha por sus seguidores a raíz de su muerte hace más de una década y que Okón encontró en Lili Marlene, un club privado de Santiago de Chile. La escultura se muestra junto a un video en dos canales que presenta una recreación de bajo presupuesto del funeral de Pinochet, empleando trabajadores y cochecitos rurales en lugar de figuras de estado, aduladores y elegantes carrozas fúnebres convocados en el club Lili Marlene. Evocando la tensión aún palpable entre la izquierda y la derecha en Chille, esta obra es una respuesta fantasmagórica a la realización de que los cambios estructurales hechos por Pinochet, un sistema neoliberal que favorece los intereses económicos de las grandes empresas privadas, siguen firmemente en pie. Pinochet no está muerto (o sepultado).

La primera parte de Chille es una reconstrucción a gran escala de una idealizada maqueta del funeral de Augusto Pinochet (1915-2006) hecha por sus seguidores a raíz de su muerte hace más de una década y que Okón encontró en Lili Marlene, un club privado de Santiago de Chile. La escultura se muestra junto a un video en dos canales que presenta una recreación de bajo presupuesto del funeral de Pinochet, empleando trabajadores y cochecitos rurales en lugar de figuras de estado, aduladores y elegantes carrozas fúnebres convocados en el club Lili Marlene. Evocando la tensión aún palpable entre la izquierda y la derecha en Chille, esta obra es una respuesta fantasmagórica a la realización de que los cambios estructurales hechos por Pinochet, un sistema neoliberal que favorece los intereses económicos de las grandes empresas privadas, siguen firmemente en pie. Pinochet no está muerto (o sepultado).

Obras de la sala