El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico
Hombre con sombrero | El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico | Museo Amparo, Puebla
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Hombre con sombrero

Región Valle de México
Período Colonial temprano
Año 1521-1600 d.C.
Período 9 Colonial temprano
Año 1521-1600 d.C.
Técnica

Barro moldeado, pulido con engobe anaranjado

Medidas 5.2   x 3.6  x 2.4  cm
Ubicación Bóveda Prehispánico
No. registro 52 22 MA FA 57PJ 1640
Investigador

La llegada de los españoles a Mesoamérica provocó una transformación radical en las sociedades indígenas. En un corto período de tiempo, sus creencias religiosas y espirituales fueron suplantadas por el cristianismo, su sistema político y social se vio alterado, y sus formas de vida experimentaron cambios significativos.

La introducción de nuevos objetos cotidianos provenientes de Europa tuvo un impacto profundo en la vida diaria de las personas. Herramientas como las tijeras y las agujas revolucionaron las técnicas de trabajo y la producción de textiles, mientras que la llegada del papel abrió nuevas posibilidades en la escritura y la comunicación.

Los territorios mesoamericanos también se vieron afectados por las transformaciones. Los españoles introdujeron nuevos cultivos, como el trigo y el ganado, como caballos, vacas y borregos, que modificaron los paisajes y las prácticas agrícolas de la región. Además, se construyeron nuevos edificios y estructuras arquitectónicas que reflejaban el estilo europeo, dejando una huella duradera en el paisaje.

Sin embargo, en medio de este panorama de cambio, también emergieron ciertas continuidades que variaron en su intensidad dependiendo de la proximidad o lejanía del poder español. A lo largo de un prolongado periodo, la vestimenta de las personas experimentó cambios mínimos, preservando en gran medida sus formas tradicionales. Del mismo modo, los lugares de residencia en las zonas rurales se mantuvieron prácticamente inalterados, conservando su estructura y esencia. Incluso en las localidades más apartadas, la vida cotidiana sufrió escasas modificaciones. Además, en el ámbito de los utensilios y herramientas de uso diario, pervivió la cultura material anterior, destacando la presencia de las icónicas grandes ollas de barro, los cajetes para la comida, los comales para la elaboración de tortillas y, asombrosamente, las figurillas continuaron formando parte de la vida cotidiana.

Esta pieza representa la cabeza de un hombre, aunque solo contamos con este fragmento, podemos inferir que pertenece a la época colonial debido a su indumentaria. Los ojos están representados de forma cóncava, con el párpado marcado, seguido por una línea curva que simula las cejas. Debajo de estas características faciales se encuentra una nariz pequeña, con un perfil curvo divergente. Los labios están separados, y a los lados de la cabeza se aprecia la presencia de un rectángulo. Sobre este rectángulo se ubica un gran prisma rectangular, que se asemeja a un prominente sombrero.

Lamentablemente, no podemos determinar con certeza a quién representaba la figurilla en cuestión. Sin embargo, es importante destacar que este tipo de figurillas eran representativas de la diversidad de la sociedad novohispana. Podemos encontrar representaciones de figuras religiosas como María, Jesús y los santos, así como personajes españoles montando a caballo e indígenas llevando a cabo actividades cotidianas, como la caza de patos o el uso de canoas. Estas figurillas de barro capturaban la variedad de roles y escenas de la vida en la época colonial, reflejando la interacción entre las culturas indígena y española y la fusión de sus tradiciones.

Además de lo mencionado, estas figurillas de barro también capturaron la incorporación del nuevo mundo natural que llegó con la colonización. Junto a los animales emblemáticos de la tradición prehispánica, como el águila, el jaguar, las serpientes y los peces, se integraron también representaciones de los nuevos animales introducidos, tales como los caballos, las ovejas, los burros, las gallinas y las vacas.

Estas figurillas de barro, que representaban el nuevo mundo natural y cultural, tenían un carácter dual tanto lúdico como ritual. Al observar estos utensilios y las marcas de desgaste que presentan, resulta inevitable pensar que fueron utilizados como juguetes, permitiendo a los niños apropiarse de elementos cotidianos con los que convivían y así integrarlos en su propio mundo imaginativo.

Sin embargo, es importante destacar que muchas de estas piezas también se utilizaban en los nacimientos, siendo común representar escenas religiosas en un entorno local. Esta práctica buscaba integrar la religión en el nuevo contexto y en la comunidad, a la vez que confería un carácter sagrado a la región. Los franciscanos fueron especialmente activos en el empleo de estos elementos, utilizando esta estrategia para difundir su fe y establecer una conexión espiritual con la población local.

La llegada de los españoles a Mesoamérica provocó una transformación radical en las sociedades indígenas. En un corto período de tiempo, sus creencias religiosas y espirituales fueron suplantadas por el cristianismo, su sistema político y social se vio alterado, y sus formas de vida experimentaron cambios significativos.

Obras de la sala

El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico