El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico
Pendiente aviforme | El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico | Museo Amparo, Puebla
Pendiente aviforme | El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico | Museo Amparo, Puebla

Pendiente aviforme

Cultura Occidente de México
Región Desconocida
Período Desconocido
Período 9 Desconocido
Técnica

Posiblemente pizarra cortada, perforada y pulida

Medidas 9.3   x 6.1  x 0.5  cm
Ubicación Sala 4. Sociedad y costumbres
No. registro 52 22 MA FA 57PJ 359
Investigador

Respecto a este objeto, de atribución cultural, procedencia y temporalidad desconocidas, se puede plantear tentativamente que está hecha de pizarra, una roca de grano muy fino y acentuada orientación plana, por la cual recibe su denominación. Los geólogos la definen como una roca de origen metamórfico, originaria de sedimentos compuestos por minerales de arcilla con cuarzo y mica. Dada su formación natural existen diversos tipos con diferentes coloraciones y durezas; las hay de tono grisáceo, pardo, rojo, verde o negro. La pieza que nos ocupa tiene la vista frontal rojiza y un pulido muy fino; la posterior es gris oscuro, de modo contrastante muestra la superficie irregular, con claras huellas de desgaste y menor pulimento. Entre los implícitos en la manufactura de este ornamento de reducido espesor y bordes rectos se hallan la destreza y el uso de herramientas especializadas; las dos vistas permiten apreciar distintos pasos de un elaborado proceso.

La silueta tiene forma de un ave con la cabeza de perfil y el cuerpo de frente con las alas plegadas y una ancha cola como base. La configuración general y en particular el pico cónico corto remiten a un ave del orden de los paseriformes, la cual abarca a más de la mitad de las especies de aves del mundo y en lo básico son de tamaño pequeño. Presenta tres perforaciones circulares, uno figura un ojo, los otros dos en el cuello y cerca de la base de la cola pudieron servir para pender la pieza en acomodo vertical u horizontal, quizás en un collar; otra posibilidad es que fuera cosida en una prenda.

En todo caso, resalta la diversidad de materiales empleados en los adornos y atuendos que indicaban el estatus de sus portadores; con frecuencia estos objetos acompañaron a los individuos en sus sepulturas, en este tipo de contexto religioso igualmente cumplieron funciones simbólicas. Jacqueline Larralde Sáenz, quien coleccionara originalmente esta obra, señala que está hecha de pirita y tiene su origen en Tabasco.

Respecto a este objeto, de atribución cultural, procedencia y temporalidad desconocidas, se puede plantear tentativamente que está hecha de pizarra, una roca de grano muy fino y acentuada orientación plana, por la cual recibe su denominación. Los geólogos la definen como una roca de origen metamórfico, originaria de sedimentos compuestos por minerales de arcilla con cuarzo y mica. Dada su formación natural existen diversos tipos con diferentes coloraciones y durezas; las hay de tono grisáceo, pardo, rojo, verde o negro. La pieza que nos ocupa tiene la vista frontal rojiza y un pulido muy fino; la posterior es gris oscuro, de modo contrastante muestra la superficie irregular, con claras huellas de desgaste y menor pulimento. Entre los implícitos en la manufactura de este ornamento de reducido espesor y bordes rectos se hallan la destreza y el uso de herramientas especializadas; las dos vistas permiten apreciar distintos pasos de un elaborado proceso.

Obras de la sala

El México antiguo. Salas de Arte Prehispánico