Hijo del escenógrafo Luis Moya y de la antioqueña Alicia Moreno, Rodrigo Moya nace el 10 de abril de 1934 en Medellín, Colombia. Dos años después, la familia Moya Moreno se instala en México donde el padre comienza a trabajar exitosamente en teatro y cine. La primera vivienda de Moya es el Centro Histórico; de ahí, la familia se muda a la colonia Tabacalera, y posteriormente, a la Avenida Insurgentes, frente al Parque Hundido.
El joven Moya comienza a estudiar Ingeniería Civil en la Universidad Nacional, pero a los veinte años abandona los estudios para trabajar, entre otras ocupaciones, como floor manager en Televicentro. Ahí se encuentra con el reportero colombiano Guillermo Angulo, quien lo introduce a la fotografía y lo contrata como “chícharo” de sus reportajes en la revista Impacto. Es en ésta y bajo la guía de su director, Regino Hernández Llergo, donde Moya aprende a editar fotografía.
En 1955 realiza su primer ensayo en el Valle del Mezquital y, de ahí en adelante, vive de vender reportajes a revistas ilustradas como Impacto, Siempre, Hoy y Mañana. Hacia 1960 conoce a Manuel del Castillo Negrete y se integra al equipo de documentación del Departamento de Catálogo y Restauración de Patrimonio Artístico del INAH. En 1964 recibe una invitación de Gustavo Alatriste, dueño de Sucesos para todos, para formar parte del equipo editorial de la revista. En ésta publica un número importante de reportajes de carácter político y social, a los que acompañan textos escritos por él o por el equipo de “Pinco Palino” (Perico de los palotes). Con Mario Menéndez, director de Sucesos, realiza varios reportajes de las luchas guerrilleras en Guatemala, Panamá y Venezuela. Decepcionado del progresivo amarillismo del periodismo, se retira de la prensa en 1968 para dedicarse a la publicación de una revista de pesca, Técnica pesquera, que cierra tres décadas después.
En 1999 sufre una grave enfermedad, tras la cual se muda a Cuernavaca, donde se reencuentra con su archivo. Después de “fusilar” los negativos que no le gustaban, Rodrigo Moya se dedica, desde entonces, a la amorosa ordenación, cuidado y edición de sus mejores fotografías.
En el Museo Amparo, su obra fotográfica se presentó en la muestra individual Rodrigo Moya. México, y en la exposición colectiva El dorado / de la utopía al mito contemporáneo (2024).
Actualizado: 11 de octubre de 2024