La geometría de esta intervención es una paradoja: atravesar el acceso por una pared equivale a convertir el límite en un diagrama de la circulación, a la vez que dificulta, al punto de bloquear, el paso. Esta violación de la funcionalidad tiene sin embargo una precisión y autocontrol notables, que refiere a prácticas de la autoconstrucción y marginación en un código escultórico postminimalista.
La geometría de esta intervención es una paradoja: atravesar el acceso por una pared equivale a convertir el límite en un diagrama de la circulación, a la vez que dificulta, al punto de bloquear, el paso. Esta violación de la funcionalidad tiene sin embargo una precisión y autocontrol notables, que refiere a prácticas de la autoconstrucción y marginación en un código escultórico postminimalista.