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Las recetas de familia: Una tradición viva
Observar las costumbres en el diario comer y el significado de la transmisión oral de las recetas familiares, identificar los hábitos al preparar la mesa, adentrarse en el conocimiento de las formas de organización doméstica para la preparación de la celebración familiar y de la festividad comunitaria, reconocer el peso del entorno económico y de las prácticas sociales en la evolución de dichas costumbres, son aspectos de la reflexión que aborda la exposición Las recetas de familia: Una tradición viva.
El comer trasciende como un acto cultural y social. En todas las tradiciones la preparación y el cuidado de la presentación de los platillos, así como los sitios y las ocasiones para degustarlos son resultado de concepciones culturales y de entornos sociales e históricos específicos.
Los códices precolombinos dan testimonio de la relación del hombre mesoamericano con la naturaleza y de la carga ritual de algunos alimentos en las celebraciones vinculadas a los ciclos agrícolas. Conservamos también las narraciones de los cronistas españoles del siglo XVI, testimonio del asombro provocado por el encuentro con diversas especies animales y vegetales que el Nuevo Mundo ofrecía y ante sabores y olores nunca imaginados. Pero sobre todo conservamos la memoria culinaria transmitida oralmente en cada comunidad y la heredada por los protagonistas del fogón: las madres, en primer término, y las familias enteras que no sólo degustan los platillos, sino que en ocasiones participan activamente en su elaboración.
La transmisión de las fórmulas culinarias heredadas de generación en generación; la cocina y el comedor de cada casa como lugares donde se entrelazan las tradiciones gastronómicas y los secretos de una buena sazón, así como las prodigiosas y emblemáticas recetas gastronómicas gestadas en el ámbito cerrado de los conventos, traspasan la puerta de lo privado y fluyen hacia los espacios de celebración comunitaria y a los lugares públicos: restaurantes, fondas, expendio de alimentos y bebidas.
La asiduidad a tal o cual comercio para la compra de los alimentos, la elección de los ingredientes, la predilección por determinados productos, la mutua influencia de modos propios y modas externas, son aspectos que hablan de períodos de auge o de decadencia, de precariedades e inventivas de solución como es el caso de algunas empresas familiares que perduran.
La exposición muestra recetarios, libros, grabados, fotografías, implementos, utensilios y ambientaciones de cocinas tradicionales como la evocación de nuestra más entrañable memoria gustativa. Las celebraciones rituales y sociales, las festividades religiosas y las fiestas de conmemoración familiar, ocupan un capítulo especial.
En esta ocasión, el Salón de la Fama se integra como una galería del recuerdo para hacer un reconocimiento a personalidades que se han destacado por su interés en conservar y fomentar la divulgación de recetarios de cocina.
