En este proyecto se entrelazan una serie de referencias históricas, científicas y literarias que parte de dos principios de conocimiento aparentemente distintos: el Modelo estándar de la física, que se ocupa de los modos de interacción entre las partículas subatómicas; y la corriente de la microhistoria, en particular los planteamientos del italiano Carlo Ginzburg, quien, frente a los grandes relatos, propuso un modo de aproximación casi detectivesco a partir de los indicios.
Los dibujos fueron comisionados al ilustrador Jorge Aviña, quien desde la década de 1960 realiza caricaturas, publicidad y portadas de publicaciones populares como El libro vaquero y Fantomas. En estas imágenes se entreteje una narración en cuyas escenas conviven personajes de distintos ámbitos y tiempos, quienes han reflexionado sobre las formas de la investigación y la construcción de los relatos.
En este proyecto se entrelazan una serie de referencias históricas, científicas y literarias que parte de dos principios de conocimiento aparentemente distintos: el Modelo estándar de la física, que se ocupa de los modos de interacción entre las partículas subatómicas; y la corriente de la microhistoria, en particular los planteamientos del italiano Carlo Ginzburg, quien, frente a los grandes relatos, propuso un modo de aproximación casi detectivesco a partir de los indicios.