Estudió en la Escuela de Pintura y Escultura “La Esmeralda”. De 1980 a 1982 fue becado por el Instituto Nacional de Bellas Artes y a partir de ese momento comenzó a realizar exposiciones individuales y colectivas tanto en México como en Estados Unidos, Suecia, Finlandia, Bélgica, Noruega, Francia y diferentes países de América Latina.
Se desempeñó como miembro de la Comisión consultiva del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, tutor académico, jurado de artes plásticas y maestro en diversas entidades en la rama de historia del arte.
Sus desnudos de gran formato han llamado la atención de diferentes coleccionistas y en sus óleos se intuye de inmediato un trasfondo del arte renacentista resuelto de una manera contemporánea con el sello personal del autor. En su obra pictórica hay también una búsqueda de la nueva figuración, la exaltación y perfeccionamiento del dibujo del cuerpo humano, como es el caso de la Cibeles devorada; o el lenguaje que adquiere el minucioso detalle de los torrentes sanguíneos, de la que es claro ejemplo Inconceptualidad del cielo; o de las expresiones dantescas en los rostros, presente en Sobre la idea de Dios, y la Serie siglo XX, donde el concepto de expresionismo, adquiere un nombre propio con una versátil técnica en la que se manejan elementos como carbón, grafito, óleo, pastel y pigmentos sobre papel y madera.
En el Museo Amparo, la obra de Roberto Cortázar se presentó en la exposición individual Roberto Cortázar. Saturno en el mundo de los parricidas (2014), y en la muestra colectiva Propuestas cardinales como preludio del siglo XXI (2001).
Actualizado: 30 de septiembre de 2024
