Marco de madera forrado en lámina de plata para cuadro de devociones. De formato rectangular, está formado por una moldura cóncava en medio de cenefa de gallones externa e hilera interior de contrarios. En las esquinas y en los espacios intermedios lleva sobrepuestas placas lanceoladas en plancha de plata, repujadas con flores y hojarascas. Remate en plancha de plata en forma de copete compuesto por flores de mayor tamaño de cinco y seis pétalos, hojas puntiagudas y cintas ondulantes, dispuestas con simetría a partir de una doble lazada central. A modo de filacteria, la banda textil imita las cualidades de los galones de seda con rehundidos y relevados lisos y abrillantados, en contraste con las superficies rayadas de las hojarascas.
La presencia en el centro de la pintura de la imagen de San Jerónimo, flanqueado por el fundador de los dominicos y el agustino San Nicolás de Tolentino, parece señalar su pertenencia en origen a un convento de esta orden, quizá procedente de la misma ciudad de Puebla.
Sin marcas o inscripción que informe sobre su origen y cronología, por su estilo la obra puede encuadrarse dentro de la tradición barroca, pero en evolución hacia el neoclasicismo, cuando se pusieron de moda los copetes con guirnaldas de flores entrelazadas con adornos de lazos y cintas[1]. Parece por tanto una obra de transición cuya cronología presumimos caerá dentro de los años finales del siglo XVIII o en los primeros de la centuria siguiente, realizada tal vez fuera de la capital.
[1]. Véase, por ejemplo, otro marco en colección particular de principios del siglo XIX con filacteria con la inscripción «MATER DOLOROSA ORO PRO NOVIS» o las piezas expuestas en la muestra La Platería Mexicana. Cfr. México y su plata, 1980: s. p.; y AA VV, 1994: p. 88, nº 177, p. 106, nº 226.
Fuentes:
AA VV, La Platería Mexicana, México, INAH, 1994.
México y su plata, México, Ediciones de Arte Comermex, 1980.