Platón semihondo, de ala ancha, monocromo. Elaborado con barro rojo mediante el uso de un molde y posteriormente torneado; fue quemado con trípodes pues se observan huellas en el interior de la pieza.
Fue recubierto con esmalte estannífero semibrillante, con incorporación del color amarillo dentro del mismo, aplicado por inmersión, aunque ahora se encuentra craquelado. La forma de este platón es muy parecida a la de un platón de Enrique Ventosa, elaborado en los talleres de Talavera Uriarte de principios de los años veinte.
La particularidad de la pieza estriba en el uso del color amarillo junto con el esmalte estannífero; así como la aplicación del color azul en el contorno del anagrama Horacio y en el ala del platón, lo que lo convierte en una pieza austera pero a la vez muy llamativa.
Una jarra con esmalte amarillo como fondo y con decoración en negro, descrita como del siglo XIX, de colección particular, fue publicada en la revista Artes de México, "La talavera de Puebla", número 3 (1995).
Dicha técnica ha sido retomada en el siglo XXI (entre 2015 y 2017), por los talleres con denominación de origen actuales, como Talavera Santa Catarina y Talavera de la Reina.