Los habitantes del Centro Sur de Veracruz durante el Clásico Tardío realizaron magistralmente esculturas en terracota, incluso de proporciones similares a las de una persona adulta (1.50 m). A diferencia de otros periodos y otras áreas, donde las proporciones entre cuerpo, cabeza y extremidades son desproporcionadas, aquí se mantiene una estética muy parecida a los estándares del cuerpo humano, tanto en medidas corporales como en detalles estéticos.
Esta pieza corresponde a una cabeza antropomorfa femenina de terracota con 12 cm de ancho por 14 cm de alto, un tocado de cabeza de felino, que por relación corporal de 1:3 mediría cerca de 56 cm; sin embargo, por el tipo de pieza lo más probable es que mida cerca de los 30 cm y que se encuentre sedente; la cabeza forma parte de una pieza más compleja de almacenamiento, quizá de una olla por el tipo de borde que tiene en la coronilla.
Este tipo de vasijas antropomorfas se pueden encontrar en otras áreas de Mesoamérica como la figurilla Epiclásica (600-900 d. C.) tipo títere articulada de Tlaxcala con la parte superior de la cabeza de vasija, las ollas Tláloc mexicas de cuello largo y base anular o la olla cefálica Tláloc del Posclásico Temprano encontrada en Tapachula, Chiapas; así como las ollas huastecas zoomorfas (posiblemente tlacuaches) posclásicas y más cercanos a la procedencia de esta pieza con las ollas de cuello alto y delgado de forma cefálica Tláloc de La Mixtequilla del Clásico (100-900 d. C.) y las vasijas antropomorfas preclásicas del complejo Remojadas.
A diferencia de las vasijas efigie donde la figura antropomorfa o zoomorfa se adosa a la forma de la pieza, este tipo de elementos componen en sí el cuerpo de la olla.
La técnica de elaboración es modelada posiblemente estucada por los restos blancos que presenta, pero también se observa pintura roja en la parte derecha del rostro, el color de la pasta es café; al interior es hueca por las características de la vasija, la cual tiene la boca de la olla con el borde engrosado con el cuello cóncavo y es corto, se ubica en un ángulo pasado de 45°, por su posición tal vez la pieza tuvo vertedera al frente. La forma de la cabeza representa a una mujer joven con peinado parecido al cuextle huasteco, el rostro tiene forma redonda con el mentón ligeramente redondo; los ojos están levemente caídos en bajorrelieve y marcados por incisión con los párpados presentes, las pupilas circulares marcadas con estrabismo convergente en ambos ojos y no se observan las carúnculas lagrimales pero el pliegue en esa parte está marcado, así como la marca de los arcos superciliares. En la nariz se observan las fosas nasales, hechas por punzonado ancho de poca profundidad, el puente y el dorso nasal es grueso hasta llegar a la punta de ésta, que es ligeramente alta y redondeada; la boca está un poco abierta con las comisuras sutilmente hacia abajo, los labios son gruesos y no está visible el surco subnasal y sólo se observa la línea dental superior con incisiones para marcar los dientes; en los rasgos se pueden apreciar ligeramente los surcos nasogenianos; la forma de la oreja es oval con el hélix, el antihélix marcado, así como la fosa triangular, la concha y la rama inferior del antihélix y el trago, los lóbulos están alargados y unidos.
En los adornos se observa el espacio del hueco circular de las orejeras, pero no las tiene presentes, el cabello tiene un peinado tipo cuextle huasteco (hueco) con flequillo del centro a los lados de la frente con incisiones horizontales que representan el cabello, al lado derecho se observa una coleta circular incompleta. La parte central del cuextle está roto, quizá tenía una extensión del peinado o del tocado de felino. Este tocado representa posiblemente a un jaguar que se adosa frontalmente al cuello de la vasija y se une por una banda concéntrica al cuello. La facción del jaguar muestra los dientes principalmente los caninos y los incisivos.