Candida Höfer en México

16 de marzo de 2018. 23:12 h

El viernes 16 de marzo presentamos a medios locales y nacionales la exposiciónCandida Höfer en México,muestra integrada por la serie fotográfica tituladaEn México, realizada durante una estancia de la artista en nuestro país en octubre de 2015.

En la rueda de prensa participaron Patricia Ortiz Monasterio, curadora de la exposición y Ramiro Martínez Estrada, Director Ejecutivo del Museo Amparo.

Al inicio de la sesión, Patricia Ortiz Monasterio comentó a los periodistas sobre los estudios en fotografía que realizó Candida Höfer (Eberswalde, Alemania, 1944) en la afamada Academia de Arte de Düsseldorf bajo la tutela de Bernd y Hilla Becher, quienes crearon la primera cátedra de fotografía artística en 1976, y de la cual surgió la llamada Escuela de Düsseldorf, orientada hacia una “nueva objetividad”, una búsqueda de la realidad sin interpretaciones personales que se distingue por aplicar una perspectiva tipológica y serial a la representación de motivos cotidianos, aparentemente banales o casuales.

Sobre este tema destacó que en 1982 Höfer egresó de la cátedra de los Becher y en esa época era la única mujer fotógrafa en un mundo de hombres. Inicialmente realizó algunas series fotográficas en formatos pequeños comoLos turcos en Alemania, en la que refleja la vida de los trabajadores inmigrantes turcos bajo una línea documental, así como también fotografió zoológicos y museos etnográficos, siguiendo los lineamientos conceptuales de los Becher.

Fue a partir de la década de los noventa que Candida Höfer comenzó a concebir la fotografía como un medio para retratar espacios interiores de edificios icónicos aplicando en sus tomas una metodología estricta: búsqueda de simetría; frontalidad de toma; punto de fuga; utilización de la luz existente en los espacios, sea natural o artificial, sin usar flashes o lámparas; al tiempo en que empezó a predominar su interés por fotografiar lugares públicos o privados (teatros, palacios, bibliotecas, museos, salas de espera, auditorios, iglesias) en ausencia total de la presencia humana.

La curadora comentó que paradójicamente el vacío de sus imágenes funciona como un retrato psicológico del intercambio social que se da en esos lugares. Implícito en esos espacios, lo humano se percibe sólo a través de sus huellas: en la configuración de las formas, en la elección de los colores, en la colocación de los objetos. Es como si quisiera captar la huella que las personas dejan en los lugares que habitan, tratar de descubrir el aura de los mismos, la historia íntima de los edificios a través del paso del tiempo y las historias que cuentan aun cuando han quedado vacíos.

Esta muestra está integrada por la serie fotográfica tituladaEn México, realizada durante una estancia de Candida Höfer en nuestro país en octubre de 2015. De una selección preliminar de miles de edificios importantes que conforman el patrimonio arquitectónico de México, la artista retrató sólo quince edificios icónicos en distintos lugares de la República Mexicana, tomando en consideración el tiempo disponible y las distancias geográficas para llegar a ellos.

En el recorrido por las salas, Patricia Ortiz Monasterio compartió anécdotas de cómo realizaron las sesiones fotográficas en cada edificio y cuáles fueron las ciudades que visitaron; Candida Höfer y su equipo recorrieron durante veinte días Jalisco, Guanajuato, Estado de México, Puebla y Oaxaca, así como Ciudad de México. El resultado de esta investigación es una colección de fotografías en gran formato que conviven con proyecciones fotográficas e imágenes más pequeñas tomadas con una cámara que la artista trae siempre consigo revelando gestos únicos: una vela en el piso de la Catedral, el borde colorido del umbral de una puerta, las vetas del mármol de Bellas Artes, un rayón en la pared. Al intercambiar fotografías de espacios a gran escala con fotografías de detalles, Höfer produce un emotivo diálogo entre la majestuosidad de la arquitectura monumental y la humildad del pequeño recoveco, permitiendo ver el lado más personal de su mirada.