Estudió en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Paralelo a la arquitectura, el diseño industrial siempre ha influido en su trabajo. Para Hagerman, trabajar con el mobiliario es “trabajar con la escala más pequeña de la arquitectura”, especialmente con la silla, “esa silla de palo que hay en todos los pueblos de México”. Esta postura lo mantiene cerca del mundo rural y de la otra arquitectura, la menos protagonista y la más necesaria.
Desde 2010, como becario del Sistema de Creadores de Arte del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA), ha investigado y propuesto soluciones para la vivienda de los más pobres, preparando a maestros de obra en el uso de técnicas tradicionales de construcción. Su idea es que con el tiempo las personas aprendan a construir con calidad sus propias viviendas, como lo hacían antes.
Su trabajo se ha expuesto en diferentes museos y universidades del país. En 2007 se le otorgó el premio Príncipe Claus de Holanda con el tema Cultura y Conflicto. Es Doctor Honoris Causa por la Universidad Iberoamericana de Puebla y México.
En el Museo Amparo, la obra de Oscar Hagerman se presentó en la exposición Casas acariciadoras. Mariana Yampolsky y Óscar Hagerman (1993).
Actualizado: 11 de marzo de 2023.
